domingo, 17 de abril de 2011

Tapa. Domingo 17 de abril de 2011

serán los más privilegiados…


                                                     Bienvenido al sistema de salud


 Elena Clavell *

La Ley 18.211, que establece las bases del Sistema Nacional Integrado de Salud, determina que tendrán cobertura asistencial los hijos de los usuarios amparados por el Seguro Nacional de Salud.
Esto significa una ampliación con respecto al antiguo régimen de Disse, en el cual sólo estaban amparados los trabajadores activos, y responde a uno de los objetivos fundamentales de la reforma de salud: lograr que toda la población uruguaya esté amparada por el Seguro Nacional de Salud.

Si bien los nuevos colectivos que ingresaron al Seguro son varios (funcionarios públicos, cónyuges y concubinos), en esta oportunidad nos detendremos en los hijos por entender que su ingreso es prioritario para un país como el nuestro, con baja tasa de natalidad, donde cada hija o hijo es un bien precioso.

La Cartilla de Derechos y Deberes de los Usuarios y Pacientes de los servicios de salud, en su artículo 5to. resume las condiciones de ese amparo: todos los hijos y menores a cargo de usuarios Fonasa estarán amparados por el Seguro Nacional de Salud cuando tengan menos de 18 años y también si son mayores de esa edad con discapacidad. 

Los padres, tutores, curadores o titulares de guarda concedida judicialmente deberán inscribirlos en  instituciones de salud que integren el seguro. Es importante resaltar que la inscripción la hará quien tenga la guarda o tutela, con independencia de si es o no quien hace el aporte al Seguro.

Los hijos o menores a cargo de beneficiarios del Seguro que tengan entre 18 y hasta cumplir los 21 años, podrán seguir amparados por el mismo pagando a la institución de salud una cuota bonificada que determina el Poder Ejecutivo. En estos casos, tanto pueden seguir en el mismo prestador que tenían como menores de edad como elegir otro. Si al cumplir 21 años aún no son trabajadores, tendrán treinta días para optar por permanecer como afiliados individuales en la misma institución sin que esta pueda rechazarlos. Si no hacen esa opción ni usan los servicios, la institución no podrá reclamarles pago alguno.

Recientemente, la Ley 18.731 avanzó aún más, determinando que ante la pérdida de la calidad de tributario al Fonasa de un adulto, los menores a su cargo podrán continuar amparados por el seguro hasta por un año.
Los recién nacidos quedan afiliados al servicio de salud en el que esté inscripta su madre, pudiendo sus responsables adultos, si así lo prefieren, trasladarlos a otro prestador en un plazo máximo de 90 días contados a partir del nacimiento.
Puede ocurrir que al momento del nacimiento los padres u otros responsables legales hubieran perdido la cobertura del Seguro Nacional de Salud, o que el recién nacido sea nieto de un beneficiario del mismo. En ambos casos, los niños tendrán cobertura a través del Seguro hasta el último día del mes siguiente al del nacimiento; a partir de ese momento la institución no podrá rechazarlos si los adultos deciden mantenerlos afiliados a la misma, pagando por los servicios que reciban. Los dos últimos beneficios no rigen si se trata e un seguro integral. Porque niñas, niños y adolescentes tienen derecho al bienestar físico, mental y social, es decir tienen derecho a la salud, el Ministerio de Salud Pública debe garantizarles el acceso  a una atención integral y en ese camino estamos.

(*) Directora General del Sistema Nacional Integrado de Salud, representante del Ministerio de Salud Pública en la Junta Nacional de Salud.

CIDH: Estados deben eliminar barreras de acceso al aborto

En comunicado de prensa al cierre de su 141 período ordinario de sesiones, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) de la OEA afirmó que los Estados deberían eliminar la sanción penal para el acceso a los servicios de salud materna, que incluyen la interrupción del embarazo para garantizar el derecho a la salud de las mujeres. El pronunciamiento histórico se generó luego de la audiencia sobre los derechos reproductivos de las mujeres en Latinoamérica y el Caribe, celebrada el 28 de marzo pasado en la cual representantes de 12 países del área, incluido Uruguay, le presentaron información sobre los graves obstáculos que enfrentan la mujeres para el ejercicio efectivo y pleno de sus derechos, por falta de acceso al aborto legal.
El informe sobre la situación del aborto en Latinoamérica y el Caribe, que se presentó a la CIDH de la Organización de Estados Americanos, fue suscripto por organizaciones de la sociedad civil de El Salvador, Argentina, Honduras, Paraguay, Perú,República Dominicana, Costa Rica, Brasil, México, Colombia, Uruguay, además de las regionales Ipas Centroamérica y Campaña28 de Setiembre, Día por la Despenalización del Aborto en América Latina y el Caribe. En el anexo al comunicado de prensa producido al cierre de las sesiones realizadas del 21 de marzo al 1ro. de abril, la CIDH refiere que “recibió información sobre una interpretación restringida del derecho a la salud excluyente de los derechos reproductivos en el marco de las políticas públicas de los Estados”. También que las organizaciones le informaron restrictivas sobre la interrupción legal del embarazo, incluyendo la práctica de abortos en condiciones inseguras y la morbi-mortalidad materna, problemáticas que afectan de manera especial a las niñas y mujeres jóvenes pobres, de bajo nivel educativo y que habitan en zonas rurales”. Asimismo, en la audiencia especial que les concediera, se plantearon casos individuales de mujeres que al acudir a instituciones de salud para recibir servicios obstétricos por partos prematuros, fueron denunciadas por el delito de aborto u homicidio por parentesco y condenadas a prisión (ver recuadro).
 CUESTION DE DERECHOS HUMANOS
Al respecto, la CIDH “reitera que la salud reproductiva de las mujeres debe ocupar un lugar prioritario en las iniciativas legislativas y los programas de salud nacional y local en las esferas de prevención y protección. Esto conlleva el deber de analizar de forma pormenorizada todas las leyes, normas, prácticas y políticas públicas que en su texto o en la práctica puedan tener un impacto discriminatorio en las mujeres en su acceso a servicios de salud reproductiva y prevenir las consecuencias negativas que estas medidas pudieran tener en
el ejercicio de sus derechos humanos en general”. 

“Los Estados están igualmente obligados a eliminar todas las barreras de derecho y de hecho que impiden a las mujeres su acceso a servicios de salud materna que ellas necesitan, como la sanción penal al acudir a esos
servicios”, agrega. 
Por último, la CIDH recuerda a los Estados que el aborto terapéutico “es reconocido internacionalmente como un servicio de salud especializado y necesario para las mujeres,cuya finalidad es salvar la vida de la madreEn comunicado de prensa al cierre de su 141 período ordinario de sesiones, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) de la OEA afirmó que los Estados deberían eliminar la sanción penal para el acceso a los servicios de salud materna, que incluyen la interrupción del embarazo para garantizar el derecho a la salud de las mujeres. El pronunciamiento histórico se generó luego de la audiencia sobre los derechos reproductivos de las mujeres en Latinoamérica y el Caribe, celebrada el 28 de marzo pasado, en la cual representantes de 12 países del área, incluido Uruguay, le presentaron información sobre los graves obstáculos que enfrentan la mujeres para el ejercicio efectivo y pleno de sus derechos, por falta de acceso al aborto legal. 
CIDH: Estados barreras de acceso cuando ésta se encuentra en peligro a consecuencia de un embarazo, servicio cuya negación atenta contra la vida, la integridad física y psicológica de las mujeres”.
PENALIZACION NO INHIBE PRACTICA
Del informe que las organizaciones sociales presentaron a la CIDH, surge que todavía en la región existen 5 países que tienen totalmente penalizado el aborto: Chile, Nicaragua, República Dominicana, El Salvador y Honduras. En otros, los códigos penales establecen algunas causales de excepción con diferentes grados de no punibilidad, pero aún restringidas a circunstancias extremas como son los casos de violación sexual, peligro para la vida de la mujer o daños a su salud física (tal es el caso de Brasil, Bolivia, Ecuador, Costa Rica, Guatemala, Argentina, Uruguay, Haití, Paraguay, Perú, entre otros). Solamente Cuba, Puerto Rico y la Ciudad de México permiten la interrupción voluntaria del embarazo temprano.
Paradójicamente, la penalización de la interrupción del embarazo no inhibe su práctica. Según datos de la Organización Mundial de la Salud, del total de abortos que se practican en condiciones inseguras en el mundo, el 95.4% ocurre en países en vías de desarrollo con leyes restrictivas. En Latinoamérica y el Caribe ocurren anualmente entre 3.9 y 4.2 millones de abortos inseguros, cita el informe.

La misma fuente calcula que, a nivel mundial, por lo menos 66.500 mujeres mueren cada año como consecuencia del aborto inseguro. En América Latina y el Caribe el 11% de las muertes maternas es consecuencia de abortos inseguros. Las adolescentes entre 15 y 19 años de edad presentan el doble de probabilidad de morir a causa de complicaciones durante el embarazo que las mujeres entre los 20 y 24 años, y las menores de 15 años tienen cuatro veces más esa probabilidad.
Así mueren las mujeres
M.
En Pernambuco, Brasil, M, de 9 años de edad y familia pobre, fue llevada por su madre al hospital con vómitos, dolores de cabeza y abdomen. Le dijeron que cursaba un embarazo gemelar de 15 semanas. Entrevistada por el servicio social y de psicología, relató que desde los 6 años era violada por su padrastro, hecho conocido por su madre. Ambas fueron informadas sobre la posibilidad de interrupción del embarazo. Después de exámenes clínicos más detallados, se concluyó que el cuadro de salud de la niña era preocupante. La madre autorizó el aborto pero se exigió el consentimiento del padre, que no aceptó por lo que el hospital se negó a realizar el procedimiento. Madre e hija buscaron y encontraron otra institución que lo hiciera, el obispo de la ciudad intentó impedirlo y al no lograrlo, excomulgó a la madre y a todas las personas involucradas en el caso, incluido el personal de salud.

MARIA EDIS
María Edis Hernández Méndez de Castro, analfabeta, madre de 2 hijos de 7 y 9 años, vivía en una zona rural
del departamento de Morazán en El Salvador, lejos de la capital, en extrema pobreza. Su esposo emigró ilegalmente a Estados Unidos en busca de mejorar su situación. A principios de 2007, María Edis acudió a una unidad pública de salud por malestares generalizados, le descubrieron varios nódulos en el cuello pero después de cuatro consultas más, solo recibió medicación para tratar el dolor. A mediados del mismo año se embarazó y a los 7 meses de gestación presentó complicaciones obstétricas que propiciaron un parto prematuro sin asistencia médica. Fue llevada al hospital en condiciones graves, en estado de shock y preclancia. Los profesionales de la salud la denunciaron por aborto y fue detenida. En agosto de 2008 fue juzgada y condenada por homicidio agravado a 30 años de prisión. Estando en la cárcel le diagnosticaron cáncer linfático, pero no tuvo oportunidad de recibir quimioterapia. Después de cumplir 2 años y 2 meses en
prisión, en condiciones graves y con custodia carcelaria, fue trasladada al hospital donde 4 meses después falleció a causa del cáncer.
MONTOYA
En el estado mexicano de Guanajuato se documentó la situación de 7 mujeres recluidas por “homicido en razón de parentesco en agravio de un producto en gestación”: una estaba sentenciada con la pena máxima de 30 años de prisión. Entre ellas estaba también Montoya, de 19 años, cuyo relato de los hechos es el siguiente: “Yo no sabía que estaba embarazada porque siempre tuve mi regla (…) un día amanecí con vómito y dolor de estómago, tenía un semana de retraso, pensé que los malestares eran porque ya tendría mi regla (…) por la tarde, cuando fui al baño, me di cuenta que ya estaba reglando, sentí mucha sangre y coágulos, duró toda la semana, mi mamá me llevó al hospital para que me revisaran, la doctora me denunció, dijo que había tenido un aborto”. Montoya fue sentenciada a 26 años de prisión por homicidio en razón de parentesco y pasó 5 años en la cárcel.
ANA MARIA
Ana María Acevedo, 20 años, tres hijos e hijas y originaria de un pueblo de Santa Fe, Argentina, murió en mayo de 2007 a consecuencia de la negación de la interrupción  del embarazo. Tenía cáncer maxilar y un embarazo de 3  o 4 semanas cuando ella y su familia solicitaron un aborto terapéutico que le fue denegado por profesionales del Hospital Iturraspe. También le suspendieron la medicación para el tratamiento del cáncer por estar contraindicada en mujeres gestantes ya que afectaba al feto. Sufriendo dolores insoportables, la paciente fue forzada a mantener su embarazo hasta la semana 24; llegó a parir pero entró en coma farmacológico y días después murió; su hijo tampoco sobrevivió.


Otra forma de atender el embarazo y parto

Se inauguró el 1º de abril el Centro de Maternidad Montevideo (CMM ), el primero del país que promueve la atención institucional del embarazo y parto de bajo riesgo en el primer nivel de atención. Se trata de un proyecto
largamente acariciado por las y los integrantes del Instituto Perinatal del Uruguay (IPU), entre las que se encuentran Gilda Vera y Flavia Previtali, hoy directoras técnica y general del CMM respectivamente.

I.P.

 Gilda Vera
El Centro de Maternidad Montevideo, ubicado en Buracayupí 3214 esquina bulevar Artigas, está destinado en principio a usuarias dela Administración de Servicios de Salud del Estado (ASSE), Banco de Previsión Social y red de policlínicas municipales en principio, aunque pretende ser una alternativa para usuarias tanto públicas como privadas en general y sus familias. Por ahora, sólo puede dar acompañamiento y realizar controles durante el embarazo, mientras espera la habilitación del Ministerio de Salud Pública (MSP) para funcionar también como centro para el nacimiento. La iniciativa del Instituto Perinatal del Uruguay, asociación civil sin fines de lucro fundada hace cinco años con el objetivo de investigar, educar y asistir con calidad en salud perinatal, contó con el apoyo de la organización estadounidense With Woman.
Desde hace un tiempo el IPU se ha dedicado a la preparación de doulas y al acompañamiento de mujeres embarazadas y sus parejas durante el proceso de embarazo, por medio de talleres de preparación para la maternidad y paternidad, en los que participan parteras, doulas, psicólogas y ginecólogos, entre otros profesionales.
OPCION PARA LA MUJER Y SU FAMILIA
El CMM intenta “darle otra opción más a la mujer y su familia” para el proceso de preparación para el nacimiento y el momento del parto, y es un proyecto que estuvo “en nuestras mentes muchos años”, dijo a La República de las Mujeres Gilda Vera, obstetra partera desde hace 40 años y directora técnica de la institución.
La propuesta incluye un abordaje diferente, aunque institucional, de la preparación para la paternidad y maternidad, así como para el trabajo de parto, a través de un equipo interdisciplinario con alta calificación yuna infraestructura de calidad, que brinda seguridad y promueve la incorporación de la familia en el proceso normal del embarazo y el parto. En base a la educación prenatal estarán a disposición técnicas de manejo del
trabajo de parto con hidroterapia, masajes, movimiento  y participación activa de la mujer y su familia. Todo esto, según quienes dirigen el centro, “mejora el vínculo madre-padre-hijo y fortalece las relaciones familiares, colaborando a prevenir problemáticas psicosociales relevantes”.

Vera sostiene que casas de este tipo “existen en muchos lugares del mundo”, sin ir más lejos son muy comunes en Brasil, aunque en Uruguay el CMM sea el primero. Destaca que se trata de una alternativa para quienes cursen un embarazo “100% normal”, lo que se irá viendo en el curso del proceso.
Debe ser así porque el CMM no cuenta en sus instalaciones con elementos que posibiliten la asistencia de alguna dificultad que pueda presentarse. Sin embargo, la partera asegura que “está plenamente aceitado” un mecanismo de traslado por si algo así sucediera.
EL LUGAR DE LAS PARTERAS              
                                                                                          Flavia Previtalli, Directora Gral. 
Vera está convencida, y la propuesta del CMM se asienta sobre esa base, que las mujeres que transitan un proceso de preparación adecuado junto a su pareja o familia “se empoderan y por tanto pueden conducir adecuadamente su parto”, lo que garantiza que el nacimiento sea “natural y positivo”.
A su vez comentó que la aspiración del centro es lograr que todas las usuarias amparadas por el Seguro Nacional de Salud puedan  acceder a la propuesta, aunque quienes están amparadas por medio de un prestador privado deban pagar un bono de unos $100 para los talleres y un arancel un poco mayor para el parto en sí mismo.
                                                                                          
Agrega que el proyecto pretende demostrar “que son las parteras quienes deben acompañar naturalmente el proceso del parto”, con las mujeres como protagonistas, debiendo éstas solo ser derivadas a un centro de segundo nivel de atención (hospital o sanatorio) cuando la situación se complejiza.
El viernes 8 de abril el CMM abrió por primera vez sus puertas a un público que desde que se inauguró “había estado llamando”. Unas veinte mujeres y sus parejas ingresaron  al lugar para conocer la propuesta y sus instalaciones, mientras que el centro “ya está funcionandopara las policlínicas de la zona”.

Mónica Tarducci: “no tomó el poder, pero el feminismo produjo cambios notables”

Antropóloga y militante feminista, Mónica Tarducci ejerce la docencia y la investigación en la Universidad de Buenos Aires y en la Universidad de San Martín, en Argentina. Es especialista en temas de género, familia y feminismo en lo académico, a la vez que forma parte de los colectivos feministas que convocan desde ya hace
varios años a los Encuentros Nacionales de Mujeres argentinas. Su reciente visita a Uruguay conjugó dos de sus grandes pasiones: la docencia y la historia del movimiento feminista, en el marco del primer Diplomado Superior que Flacso Uruguay abre sobre género en nuestro país. Sobre su historia y las perspectivas del movimiento feminista en el sur del continente, Tarducci conversó con La República de las Mujeres.


Isabel Pérez

El Diplomado Superior en Género y Políticas de Igualdad, que Mónica Tarducci inauguró en la semana del 28 de marzo al 1ro. de abril en Montevideo con el seminario “Historia y perspectivas del movimiento feminista”, es una propuesta de formación interdisciplinaria de posgrado que se realiza por primera vez en Uruguay, y es coordinado académicamente por Carmen Beramendi, encargada del Programa Género y Cultura de Flacso.
En el marco de una institucionalidad de género en el Estado uruguayo consolidada bastante recientemente, la demanda de formación académica específica en la materia se hacía cada vez más notoria, lo que se refleja en el amplio grupo -de más 30 estudiantes- que compone esta primera generación del Diplomado en Uruguay, además de en los apoyos con los que cuenta: Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres), Agencia Española de Cooperación Internacional para en Desarrollo (Aecid), ONU Mujeres, Agesic, UTE y Ancap.

FEMINISTA ARGENTINA EN PRIMER DIPLOMADO DE GENERO EN URUGUAY
- ¿Cuál es el motivo de tu visita al país?

- Estoy dando un curso en el Diplomado Superior en Género y Políticas de Igualdad por una invitación de Carmen Beramendi y Silvana Darré. Como yo soy fundamentalmente docente y me encanta justamente la historia del movimiento feminista en el mundo y América Latina, me convocaron para dictarlo.

-¿Cuál es tu rol en la Universidad de Buenos Aires?

- Estoy en el seminario de antropología social, soy orientadora de tesis, con orientación en género. Es un seminario que guía a los y las estudiantes a que presenten un proyecto de tesis. A la vez estoy en la Universidad de San Martín y dirijo allí los posgrados en estudios de familia.

- Y además tenés una larga trayectoria de activismo feminista…

- Sí, de muchos años. Después de la dictadura me empecé a vincular al feminismo. He estado en varios grupos. Actualmente colaboro con la Campaña Nacional por el aborto legal, seguro y gratuito, desde un grupo que formamos con alumnas y egresadas jóvenes de antropología que se autoconvocaron con el nombre de Colectiva de Antropólogas Feministas.

- Pero no fue enseguida que te acercaste al feminismo; has dicho que antes eras una “joven de barrio”.


- Claro. Yo soy de la generación de los 70. En ese momento queríamos cambiar el mundo y no éramos, al menos conscientemente, feministas.No éramos conscientes de la discriminación específica hacia las mujeres. Creíamos que en un mundo socialista las mujeres y los hombres se iban a relacionar bien sólo por estar en ese sistema. Y también creo que hay un tema de juventud. Primero que esos temas no estaban establecidos, y además porque yo creo que antes de los 30 años es muy raro ser feminista.

- ¿Qué fue lo que hizo el click en Mónica Tarducci?

- Y mirá, no sé. Yo me acuerdo que tenía una admiración difusa por mujeres potentes, mujeres que hacían cosas que salían de la norma: Simone de Beauvoir, las periodistas que hacían reportajes en lugares de guerra. Tenía como una imagen idealizada de mujeres diferentes. Y después me reencontré con una compañerade la facultad, que hacía mucho que no veía, y me dijo: vení a escuchar mi trabajo que voy a exponer en un grupo. “¿En un grupo?”, le pregunté. “Sí, un grupo de mujeres”, me dijo. Fui, escuché su trabajo y ahí me invitaron a las jornadas de ATEM, un grupo feminista que está desde 1982. Justamente en ese año me invitaron y para mí fue un antes y un después. 

- ¿Qué recordás de ese encuentro?

- Fui a esas jornadas, donde las mujeres ya tenían hasta una actitud corporal diferente. No les importaba ser gorditas, ser flacas; estaban descalzas, relajadas, hablando de temas como la sexualidad. Además estábamos más cerca de las elecciones, se podía empezar a hablar.Y en esa primera jornada también me acuerdo siempre que apareció una muchacha que había estado presa, detenida desaparecida y contó su experiencia. Y eso para mí fue muy impactante. El feminismo conjugaba esas cosas ¿no?, lo personal y lo político.

LA REVOLUCION MAS DIFICIL DE COMPRENDER

- ¿Con qué panorama te encontraste en el curso que estás dictando en Uruguay?

- Yo estoy contentísima. Primero por la composición variada del grupo. Creo que para una feminista, y una profesora feminista, es muy interesante encontrarse con un grupo diverso, interesado, muy participativo, de Montevideo y del interior, comprometidas, muchas de ellas haciendo tareas vinculadas a la igualdad, sea desde el Estado, sea desde su lugar en un barrio, como parteras, etc. La verdad que es estupendo. 

- Y establece un nexo, muestra que continúa estando unida la historia del Río de la Plata en estos temas…

- Sabés que sí. Mi hermano tiene un chiste que no deja de ser real. Él dice: “los argentinos somos tan malos que cuando un uruguayo o uruguaya es sobresaliente en algo decimos  que es ´rioplatense´. Pero cuando es argentino, es argentino”. Yo creo que muchas de estas cuestiones comenzaron en las dos orillas. Y no nos olvidemos que las fronteras a veces nos dividen. ¿Qué podemos tener de diferente, más que la edad, vos que sos feminista y yo? Nos tienen que hermanar los ideales y no dividir las fronteras.

- ¿Qué perspectiva le ves al feminismo hacia el futuro? Al menos en este lugar del mundo…

- Yo creo que el movimiento feminista es un movimiento pequeño, disperso, lo cual puede ser una contra. Pero ha producido cambios culturales importantísimos. Con su fragmentación…no es un movimiento masivo, pero es un movimiento que ha permeado a la sociedad. El hecho de que estemos dando este curso, de que exista un suplemento como La República de las Mujeres, muestra que algo ha  llegado. Con todas las dificultades, porque es la revolución más difícil de comprender, la que toca los temas considerados “naturales”.
Es lógico que tenga muchas resistencias. Pero, como soy optimista, creo que más allá de contratiempos o desilusiones momentáneas, si uno lo mira históricamente, ha producido cambios notables. Aunque hoy muchos y muchas no se den cuenta que esos cambios se dieron porque hubo muchas que lucharon. No hay una toma del poder que pueda verse gráficamente, pero hay terrenos ganados, ese es nuestro triunfo: pequeñas parcelas de terrenos ganados.

Sistema educativo en deuda con la equidad

En el marco de la campaña de educación no sexista y antidiscriminatoria  que, junto a otras organizacionessociales, viene impulsando el Comité de América Latina y el Caribe para la Defensa de los Derechos de la Mujer (Cladem) tanto a nivel nacional como continental, la institución convocó a un debate sobre “Violencia de género en la educación. Un tema de seguridad pública”, que se realizó el pasado 28 de marzo en el Hotel Balmoral de Montevideo. 


Durante la actividad, que será retomada en un foro virtual habilitado para discutir, intercambiar ideas, experiencias, etc. los días 26, 27 y 28 de mayo próximos en www.educacion-nosexista.org, se analizaron, entre otros aspectos, los estereotipos aún prevalentes, la creciente violencia escolar y la falta de herramientas del cuerpo docente para prevenir esas situaciones. También se pusieron sobre la mesa datos de investigaciones recientes que mostrarían cierta brecha esperanzadora en la construcción de la subjetividad masculina y femenina por parte de adolescentes y jóvenes. 

K.T.

Al monitorear el cumplimiento de los compromisos internacionales asumidos por los estados de la región, Cladem cumple un rol de “guardián”. Objeto de ese monitoreo son los seguimientos focalizados en la Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer (Cedaw), la Convención de los derechos del Niño, la Convención sobre la eliminación de todas las formas de discriminación racial, la Convención sobre derechos económicos, sociales y culturales.
Cladem también presenta situaciones violatorias de esas convenciones y otras normas internacionales ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos de la Organización de Estados Americanos (CIDH de la OEA). Como parte de los logros más recientes obtenidos en esa tarea, se destacan:
1) el caso María Da Penha, una mujer violentada durante años por su marido en el estado de Ceará, Brasil, en el que la CIDH responsabilizó al Estado por omisión, negligencia y tolerancia en relación con la violencia doméstica brasileñas. Esa decisión del organismo internacional impulsó la aprobación en agosto de 2006 de la Ley 11.340 (conocida como “Ley Maria  da Penha”), que crea mecanismos para frenar la violencia doméstica y familiar contra la mujer y determinó la reparación a la víctima así como un pedido público de disculpas, que se concretó en 2008.

2) el caso “Campo algodonero” que involucra tres asesinatos cometidos en Ciudad Juárez, Mésico. En 2009, la CIDH manejó el  concepto de femicidio para referirse a la violencia  sistemática contra las mujeres.

3) el caso Macarena Gelman. En 2011, la CIDH condenó a Uruguay por la desaparición forzada en 1976 de su madre, María Claudia García Iruretagoyena de Gelman y el nacimiento en cautiverio y posterior apropiación de la propia Macarena durante la dictadura militar uruguaya, en el marco de la coordinación represiva conocida como Plan Cóndor.
VIOLENCIA ESCOLAR
La campaña por una educación no sexista y antidiscriminatoria que Cladem viene impulsando en el continente
durante el último año y medio, con la coordinación de la socióloga uruguaya Moriana Hernández, tuvo una primera actividad vinculada con la educación sexual y ahora se intenta dialogar e involucrar a los diversos actores de la enseñanza.

Si bien una de las metas del milenio es lograr el ingreso universal de hombres y mujeres al sistema educativo  (primaria, secundaria pero también apuntando al nivel terciario), Hernández se pregunta si alcanza con asegurar ese ingreso cuando vemos, por ejemplo, en el contexto de nuestro país, los serios problemas existentes con la permanencia en el sistema a nivel del estudiantado secundario -deserción que, por otra parte, es en mayores porcentajes de varones y de población de menores ingresos- sin dejar de señalar los déficit en la calidad educativa que demostraron claramente los resultados de las pruebas Pisa (competencias básicas: idioma español, matemáticas, ciencias naturales) que se conocieron hace pocos meses. 

Pero en el ámbito escolar hay otros temas que igualmente deberían formar parte de la agenda. “¿Qué hombres y qué mujeres está formando el sistema educativo?”, se pregunta la coordinadora, ya que los roles y estereotipos sexistas de género siguen vigentes en la práctica cotidiana y en los libros de texto.
 
La violencia que muchas veces podía desatarse en el recreo o fuera de la escuela, se ha incrementado dentro del aula. Al acoso entre pares, -“cortá pa´la salida”, “a esto vos no jugás”, etc- hoy popularmente conocido como “bullying” a partir de la película “Bowling for Colombine” que describe crudamente la violenta tragedia desatada en una institución educativa estadounidense, hay que sumarle el acoso cibernético, un tipo de patoterismo que desborda por completo a la escuela porque puede ser ejercido por cientos de personas a través de redes sociales, chats y la amplia ventana que ofrece Internet, incluyendo la pornografía infantil y el acoso sexual.

Hernández señala que hay muy pocos estudios sobre acoso sexual en el sistema educativo uruguayo y se pregunta: “¿qué hace la maestrao el maestro cuando percibe que está ante una situación de acoso sexual o de violencia doméstica?, ¿con qué herramientas cuenta?” La formación docente no tiene incorporados en su currícula ninguno de estos temas, como para que los ayuden a detectar y prevenir. “Parecería que estos temas no forman parte de la escuela”, afirma Hernández, aunque las veces que el sistema educativo actúa tampoco lo suele hacer en beneficio del niño/a, “porque lo primero que hace la escuela es querer saber si eso que dice el niño es verdad, no le cree, lo revictimiza” y, en segundo lugar, “convocan a los padres, aumentando el riesgo para ese niño”, asegura.
 

CONSTRUCCION DE SUBJETIVIDADES
En el transcurso del debate que sobre “Violencia de género en la educación. Un tema de seguridad pública” organizó Cladem y a modo de disparador, el sociólogo Juan José Meré, integrante de Onusida, presentó una multiplicidad de datos tomados de las últimas investigaciones realizadas en nuestro país respecto a la construcción de la subjetividad masculina y femenina por parte de adolescentes y jóvenes. Si bien hay algunos que parecen reforzar los estereotipos dominantes, otros abren brechas al modelo tradicional. Las mujeres (13 a 18 años) en abrumadora mayoría desean encontrar “un hombre trabajador, protector, proveedor” y los varones “una mujer delicada, dulce, compañera”, aunque el lugar de los afectos y el privilegiar la comunicación de los sentimientos parecen ser hoy más esperables de ese “hombre proveedor".
 
Las edades de inicio de las relaciones sexuales se han ido modificando y de a poco las mujeres se acercan a los guarismos de los varones. Sin embargo, la forma en que se percibe esa relación sexual es muy diferente: las chicas tienden a hacerlo con su novio, por amor y en un marco de confianza-aguante, -“yo lo comprendo, es mi novio”- pero no son pocas las que manifiestan haberlo hecho “por presión de su pareja”, lo que lleva a Meré a preguntarse si esto no puede ser interpretado como ejercicio de algún tipo/forma de violencia.

Hay una mayor aceptación de la homosexualidad y un claro rechazo a aceptar vivir relaciones de violencia sin buscar ayuda social y estatal. El porcentaje de chicas y varones que justifica el uso de la violencia es “para defenderse”,“por infidelidad” o “el que no quiera tener relaciones sexuales”.
 
RAZONES DE UNA CAMPAÑA CONTINENTAL
Parte de los motivos que impulsan la campaña de Claden es buscar “una educación que construya relaciones de respeto, igualdad y cooperación entre los géneros, que afiance una cultura de derechos humanos y que no valide ni reproduzca estereotipos, prejuicios e inequidades. Una educación que refleje las distintas culturas que conviven en este, nuestro continente, uno de los más ricos y de los más pobres a la vez".
 
 Somos 566 millones de habitantes desde Tijuana a Tierra del Fuego y si bien se avanzó en la universalización de la educación primaria, aún hoy hay tres millones de niñas y niños que no concurren a la escuela. La paridad entre los  sexos en primaria y secundaria, era la meta establecida para 2005 por los Objetivos del Milenio. Cinco años después de esa fecha, en 9 países de nuestra región siguen ingresando menos niñas que varones.
 
Hace ya 30 años que la Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer fue aprobada. No obstante, seguimos recibiendo una educación sexista bajo parámetros pretendidamente universales, ciegos ante las injustas diferencias entre géneros, que contribuyen a la discriminación.
 
No aceptamos que ser niña, pobre, negra o indígena, habitante rural o que la orientación sexual, sean condiciones que incrementen las dificultades en el ingreso, permanencia y culminación de los estudios.
 
Las niñas sufren con mayor gravedad la falta de oportunidades educativas. Los matrimonios precoces, la maternidad adolescente y los embarazos no deseados, la violencia y los abusos sexuales, el trabajo infantil, el acceso difícil a los locales escolares, y las tareas domésticas, son algunas de las barreras que se interponen a la educación de las niñas latinoamericanas y caribeñas.
 
No sólo se trata de que asistan a la escuela, queremos conseguir que nuestras niñas culminen la primaria y que aumente el acceso y la conclusión de la secundaria, cuyo cumplimiento aún no es obligatorio en varios países de la región. La universalización de la educación preescolar es una tarea pendiente y de primera magnitud. Sin ella se limitan las posibilidades de atención integral de la primera infancia, sistema educativo en deuda con la equidad particularmente de la que vive en situaciones de pobreza e indigencia y limita la inserción laboral de las madres más pobres.
 
Apuntamos a una escuela que practique el respeto a la diversidad, que deconstruya las bases ideológicas de las violencias que sufren las mujeres de todas las edades, las poblaciones indígenas y afroamericanas, las y los discapacitados y quienes optaron por una sexualidad diversa a la de los patrones imperantes. Discriminaciones que junto a la pobreza, son fuente de las mayores inequidades.

Queremos una educación que valore y reconozca la dignidad intrínseca a todas las personas. No solamente hacia quienes creen en la misma divinidad o tienen nuestras mismas opiniones. Debemos aceptar el disenso y el diálogo respetuoso, necesario para la convivencia pacífica”.
 
OBSERVACIONES DESDE EL LLANO
Desde el público asistente al debate, surgieron diversas inquietudes. Maestras que plantearon que en su  trabajo de todos los días sigue siendo difícil hablar de “ciertos” temas sin el miedo al sumario –sexualidad, posibles situaciones de abusos-. Sin embargo, una abogada integrante de la organización no gubernamental “El Faro” afirmó que “en estos últimos años se están procesando una mayor cantidad de denuncias de casos de abuso y violencia a partir de, o derivadas de, la escuela”.

También se relataron experiencias de bullying, como la vivida por un adolescente discapacitado en el Instituto Tecnológico del Uruguay (ex UTU), del que no solo se burlaban sino que terminaron colgando un video en las redes sociales, actitud totalmente deplorable pero que da la pauta de que estas cosas suceden en nuestro país (el caso fue trabajado y condenado, pero ese chico novolvió a estudiar).

Otra maestra cuestionó de qué manera podrán procesarse los cambios en la construcción de la subjetividad femenina y masculina en el aula, “si seguimos formándolos en filas por niñas y varones, sin mezclarlos, para entrar a clase”, y “eso ya tiene toda una significación muy profunda, como pasa con el uso del lenguaje inclusivo (todos y todas, los, las, etc.) que nos parece tonto de usar y de hecho no usamos pero es importante”. 
 
Por su parte, un educador social del Cerro contó su experiencia de trabajo con varones de 4 y 5 años “que no saben abrazar, besar, saludar” y como ese mundo de relacionamiento básico entre ellos a partir de los afectos tuvo que ser su punto de partida.

Integrantes de la Administración Nacional de Educación Primaria (ANEP) del Codicen destacaron la existencia e implementación de un “Manual de protocolo.de intervención en situaciones de violencia doméstica en la enseñanza media”, aprobado en 2010, ante lo que no fueron pocas y pocos del público presente que dijeron desconocerlo o que directamente no se aplicaba en las instituciones educativas porque queda a criterio de cada lugar hacerlo o no. Algo similar dijeron que sucede con el “Manual de lenguaje inclusivo”, que según muchas “duerme en los cajones” de las instituciones sin ser trabajado en el aula más que
por aquellos maestros o docentes que tienen la iniciativa y “sensibilidad”. Esto suscitó interesantes reflexiones respecto a por qué todos esos temas –incluyendo la mesa debate realizada a partir de las 19 horas pensando en la concurrencia “voluntaria” de los maestros y docentes luego de toda una jornada laboral- no se integran a la currícula formal de los planes de enseñanza, la formación de los educadores y se obliga a las instituciones a aplicarlos y manejarlos.
 
 
 
 



La vida en verde

La Fundación Logros, conocida por el trabajo que viene realizando desde fines de los noventa a través de las huertas orgánicas en las escuelas públicas, el año pasado lanzó el “proyecto verde”, una apuesta al cultivo orgánico en casa, ya sea que se cuente con un balcón, una terraza, algunas macetas o unos pocos metros de tierra disponible. “Cultivar para crecer” es el slogan de esta propuesta, aún “novedosa” para nuestro país pero muy extendida en otros lugares de mayor conciencia ecológica y ambientalista.

Karina Thove

La asistente en el área de comunicación y desarrollo de la Fundación Logros, Denisse Dalva, comienza explicando que “el desarrollo sustentable de cada persona y de la comunidad”es uno de los principales objetivos de cada programa que impulsan. El encare de la “filosofía orgánica” tiene que ver con “observar la naturaleza y reproducir lo que ella hace”. “No es solamente no utilizar productos químicos”, aclara. Reciclar, aprovechar los recursos existentes en el hogar, componer abono orgánico, aprender a utilizar “repelentes naturales” para el combate de plagas, hacer almácigos, plantines, promover la biodiversidad y el cuidado del medio ambiente, están en el menú de esta propuesta.
 “Hemos visto que en otros países hay toda una tendencia y una `movida verde´ en  los espacios urbanos. Uno recorre los balcones de Buenos Aires, las azoteas de muchos países europeos –sobre todo los nórdicos- y ve que la gente cultiva, aprovecha esos espacios. Nosotros queremos promover el cultivo en los
pequeños espacios, que los uruguayos se animen a hacerlo”. No sólo se puede tener flores o hierbas aromáticas, sino que cualquier hortaliza puede crecer junto a un helecho o una enredadera. “Queremos que en las azoteas haya  cultivos, no solo para mirar sino para comer; incluso en los espacios públicos podría haber, en los canteros, en los espacios comunes de los edificios”, se entusiasma Dalva.
“Muchas personas tienen el prejuicio de ´cómo no sé como plantar, no lo voy a hacer bien´ o ´no tengo la mano verde´, entonces, por desconocimiento ya se desaniman y piensan que no es posible porque solo se puede cultivar si tenemos un gran fondo, una chacra o un gran jardín enfrente de nuestra casa”, afirma la comunicadora.

LLEGANDO AL GRAN PÚBLICO

Si bien está pensado para la vida urbana, en realidad se busca incentivar a la población en general a cultivar porque “Uruguay tiene tierra de sobra”, asegura Dalva y por eso la campaña apuesta al público masivo, de cualquier edad, estrato social y ubicación geográfica.

Este año hicieron dos seminarios en el Teatro Solís con participación de público a tope, por lo que están pensando realizar nuevos seminarios y, a largo plazo, poder hacerlos en otros puntos del país. La respuesta del público los sorprendió por ser muy heterogénea: “Tenías gente que llevó sus hijos, gente joven, personas
mayores, de buen poder adquisitivo y más humildes”.

Otra sorpresa fue ver “la cantidad de hombres interesados, porque muchas veces se tiene el estereotipo de que es solo la señora mayor y `de cierto nivel´ la que planta”, destacó. El cultivo orgánico “no es más caro” porqueel mensaje que lleva implícito es “aprender a utilizar lo que ya tenemos”, como muy bien se plantea desde el trabajo en las huertas orgánicas escolares. “Lo que enseñamos en los cursos es que no tenés por qué ir a buscar la maceta más linda: podes utilizar el vasito de yogur, la lata…alguien utilizó una pelota como recipiente para plantar una lechuga”, cuenta Dalva e insiste: “Nosotros creemos que la agricultura orgánica no es para privilegiados, al revés, es para todos y es súper democrática porque siempre estás usando lo que ya tenés”.
Proyecto verde” se lanzó en abril de 2010 y está íntegramente explicitado en la web fundacionlogros.org.uy (incluye videos explicativos) pero, al igual que sucede con las huertas orgánicas y otros programas de la Fundación, pretende tener continuidad y mayor desarrollo en el tiempo. Cuenta con un espacio en televisión: todos los lunes en el programa “Hola  vecinos”, ingenieros agrónomos explican distintos  aspectos del cultivo orgánico.

Por otro lado, en el pasado noviembre lanzaron el “Manual para aprender a cultivar orgánico”, que se puede adquirir a través de la Red Pagos por 150 pesos, incluyendo 5 paquetes de semillas. Si solo se quiere comprar las semillas, están disponibles en Geant, Devoto y Disco de todo el país a un costo de 12 pesos por paquete y con un rendimiento anual, por lo que la propuesta es accesible para toda la población.
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Violar niñas pobres no es tan grave para juez argentino

La Sala I del Tribunal de Casación Penal de la provincia de Buenos Aires redujo a la mitad la pena de un pastor evangélico de 59 años de edad, violador de dos niñas de 14 y 16 años, con el  fundamento de que las víctimas -de condición humilde- “poseían experiencia sexual” y que en su nivel social se aceptan las relaciones sexuales a edades tempranas. En el fallo, el juez Horacio Piombo afirma que “lo hecho por el condenado (…) no lo veo como algo moralmente edificante, pero tampoco como un quehacer aberrante, repulsivo, que hiera
la integridad sexual”.

En 2008, el pastor Francisco Avalos había sido condenado en primera instancia a 18 años de prisión por cuatro abusos sexuales con acceso carnal cometidos en 2000. También se le imputó el delito de corrupción de menores por ser dos de sus víctimas mejores de edad. Del expediente surge que aprovechaba su condición religiosa y les inculcaba que eran “elegidas por Dios” para tener hijos con él, por lo que no debían resistirse.

Esa sentencia fue recurrida y finalmente el Tribunal de alzada redujo la condena a 9 años y 6 meses, lo que desató una oleada de fuertes críticas, centradas en su carácter discriminatorio. Lo que el fallo parece postular es que si en un determinado ámbito social ciertas conductas son habituales, las normas legales que las proscriben se relativizan, pierden importancia. Concretamente, si en los sectores más pobres, con condiciones de vida precarias, hacinamiento, falta de educación, de salud, de vivienda, las relaciones sexuales a edades tempranas son más comunes, el abuso sexual es menos grave. Con esa óptica, no podría haber corrupción de menores, básicamente porque las menores en todo caso ya eran corruptas. Poco falta para endilgarle culpa a las víctimas…

Raúl Pérez, diputado provincial por el Frente para la Victoria, pidió el enjuiciamiento de los magistrados por el delito de mal desempeño y sus argumentos discriminatorios. 

Primera sentencia por pornografía infantil en México

El pasado 31 de marzo un juez federal hizo historia dictando la primera sentencia por pornografía infantil en México. Le dio 13 años de prisión a Jean Succar Kuri y exigió que su familia, que resguarda su fortuna en California, pague 350 mil pesos a cada víctima por resarcimiento del daño moral. La opinión pública ha preguntado en redes sociales: ¿son suficientes 13 años de prisión para semejantes delitos?, ¿saldrá en 8 años?
 
Lydia Cacho *

A fines del 2004 varias niñas denunciaron cómo el empresario Jean Succar Kuri, nacido en Líbano y con ciudadanía mexicana y estadounidense, violaba niñas, niños y adolescentes, filmando todo para enviarlo por internet. Succar huyó de Cancún (balneario del sudeste mexicano). La Procuraduría General de la República (PGR) de México ordenó su búsqueda a Interpol y solicitó congelar las cuentas millonarias de sus empresas, bajo cargos de pornografía infantil y lavado de dinero; tenía evidencia de videos con 20 menores de 8 a 14 años en la computadora de Succar. El 5 de febrero de 2004 fue arrestado en Arizona.

De inmediato Kamel Nacif, socio y  amigo, contrató un despacho de abogados estadounidenses que intentó comprar al juez David K. Duncan para evitar la extradición (existe una grabacióntelefónica que demuestra su fallido intento de sobornar al juez). La PGR pide la extradición. Las víctimas que habían declarado fueron amenazadas de muerte por Succar.

“LOS DEMONIOS DEL EDEN” 

En 2005 publiqué el libro “Los demonios del edén”, que revela las redes de complicidades de pederastas, políticos y  turismo sexual infantil (aún no existía en México la Ley contra la Trata de Personas). Ocho meses después Nacif, para evitar la extradición de Succar, pidió al entonces gobernador del estado Puebla (centro de México), Mario Marín, que me arrestaran y encarcelaran con miras a que negara lo que mi libro denunciaba. En febrero del 2006 el periódico de mi país “La Jornada” y la periodista Aristegui revelaron grabaciones entre Succar, Nacif, Marín y otros tres gobernadores que mostraban sus complicidades.

El 3 de julio de 2006 Succar fue extraditado y se le dictaron cuatro autos de formal prisión por corrupción de menores, violación equiparada, abusos deshonestos y pornografía infantil. Se llevaron dos juicios paralelos, uno en un juzgado federal por pornografía y otro del fuero común de Cancún por los demás delitos. 
 
Mientras, las niñas siguieron en terapia, y bajo permanente acoso de la familia de Succar. Denuncié ante la PGR al gobernador y sus cómplices.
 
Llevamos el caso a la Suprema Corte y lo perdimos. Cuatro de once ministros publicaron un libro para expresar su desacuerdo con el fallo y su convencimiento de la culpabilidad de Marín y sus cómplices.
 
Mientras los juicios contra Succar seguían, fue trasladado al penal del Altiplano donde pasó dos años. Los jueces favorecían a Succar y presionaban a víctimas y testigos para carearse con él. Las víctimas sufrieron recaídas emocionales ante la violencia con que eran tratadas en tribunales; los peritos y testigos eran amenazados de muerte.
 
Las niñas y niños abusados por Succar han tenido problemas en la escuela, depresión y ansiedad.

Ahora, siete años después de su denuncia, reciben la noticia: “¡Ya no tendré pesadillas!”, dice una de ellas. “¡Entonces dijo el juez que sí dijimos la verdad!”, expresa el niño emocionado.

LA HISTORIA NO HA TERMINADO

El resarcimiento del daño moral (350 mil pesos) a las siete víctimas que siguieron el proceso serviría para pagar su terapia y becas escolares. Sin embargo, Succar apeló la sentencia y se niega a pagar.
 
 De la sentencia de 13 años se descontarán los que lleva preso (debieron darle 24 años). Tiene 68 años y en la cárcel de Cancún vive con privilegios de toda índole, se ve recuperado y sano.

Por otro lado el juez Echeverría Tun, del  fuero común, ha exigido que las víctimas se careen nuevamente con Succar antes de dictar  la otra sentencia de 60 años. Las niñas han dicho que ya no pueden más, se niegan a revivir el dolor ante quien les ha arrebatado toda su infancia y adolescencia.

A pesar de la argumentación jurídica y la confesión de Succar, el juez demora la sentencia. Sería insólito, pero no imposible, que a pesar de ser el caso más notable de pornografía y explotación sexual infantil de la historia de México, quienes protegen a Succar y la historia detrás de él, logren lo inimaginable: un giro a favor del pederasta. 
 
Las niñas y niños han cerrado su ciclo, celebran -y nosotras con ellos- la victoria de su odisea. Pero la guardia debe seguir en alto, la historia no ha terminado.

(*) Periodista mexicana, www.lydiacacho.net Twitter: @lydiacachosi
 
 

Locas por su lugar en mecanización de la caña

 Edición 17 de abril 2011
“Están locas”, sentenciaron maridos y familiares de la mayoría de las 34 mujeres que decidieron convertirse en operadoras de máquinas cosechadoras de caña de azúcar en el sur de Brasil, en un desafío al monopolio masculino avivado por la expansión del sector y la buena remuneración. Pero cuando IPS habló con ellas, dejaron claro que nada va a detenerlas en su lucha por romper un tabú de la localidad de Guariba y otras muchas en el sureño estado de São Paulo: el de que no es tarea para mujeres el conducir las enormes máquinas, solitariamente y a veces de noche, por los cañaverales sin fin de la región.

Mario Osava
El embarazo de siete meses no impidió a Rosana do Carmo, de 33 años y madre ya de otros tres hijos, hacer el curso ofrecido por la Secretaría de Empleo y Relaciones del Trabajo (SERT) de Guariba, un municipio de 35.000 habitantes ubicado en la zona demayor producción cañera de Brasil, a unos 300 kilómetros de la ciudad de São Paulo.

Su anhelo es concluir antes del parto las clases teóricas, de cuatro horas las noches laborables. La parte práctica, con la cosechadora en pleno cañaveral, la dejará para cuando el bebe crezca un poco. Antes hizo otro curso para manejar tractores. Era “la única mujer entre 18 hombres” y soportó bromas como la repetida de “pies demasiado chicos para los pedales”. Lejos de amilanarse, Do Carmo está decidida a conducir una máquina más grande y compleja, en busca de “dignidad y prosperidad”.

El curso para operar las cosechadoras es exclusivamente para mujeres. La actividad cañera emplea escasas mujeres y son ellas las que más sufren la desocupación por el proceso de mecanización de la cosecha, explicó a IPS el secretario de Empleo, José Roberto de Abreu.

Muchas de las participantes son divorciadas que crían a sus hijos solas, en una zona donde la alta oferta de trabajo temporal atrae a trabajadores desde muchos confines, fomentando separaciones y nuevas parejas, acotó. Es el caso de Noemia Pereira de Melo, de 37 años y dos hijas, respetada por sus condiscípulas por su larga experiencia como cortadora. “Corto caña desde los 18 años”, contó. Primero siguió los pasos de su padre, que se trasladaba cada cosecha, y luego se estableció con su familia en Guariba. También ejerció otras funciones dentro de la industria azucarera, como soldadora, pero su sueño es operar una cosechadora. Ya hizo un curso, donde estaban “solo yo de mujer y 40 hombres”, pero no recibió clases prácticas y no logró ser contratada. Ahora cree que tendrá suerte, porque una planta local empleará más mujeres. “Quiero dejar el corte de caña, evolucionar”, sostuvo. Además, las muchas horas diarias con el machete le provocaron una bursitis “de la que mi brazo nunca se recuperó pese a los tratamientos”, se lamentó.
UNA POLITICA PUBLICA OPORTUNA

São Paulo, el estado que produce 60% del  azúcar y el etanol de Brasil, abolirá en 2014 la quema de cañaverales que facilita la cosecha manual, por un acuerdo entre su gobierno y la industria cañera. Eso obliga a sustituir por máquinas a los cortadores, que sumaban 140.000 el año pasado, según un estudio de la  Universidad Estadual Paulista.

Varias organizaciones públicas y privadas tratan de recalificar parte de los cortadores en tareas agrícolas e industriales más tecnificadas, lo que permitirá a los que lo logren tener empleos mejor pagados y permanentes, en lugar de los actuales de ocho meses al año. Este primer curso impulsado por Abreu beca con el equivalente a 210 dólares a las 34 seleccionadas. Es una idea que tenía desde que asumió la SERT en 2009, después de trabajar muchos años en centrales azucareras como técnico agrícola, gerente de mecanización y capacitador. “Preveo deserciones, pero hay otras mujeres esperando cupo”, comentó. La SERT ofrece también cursos para otras funciones dentro del sector cañero, como conductores de tractores y apiladores, y para otras áreas, como la construcción, la confección textil y la cocina industrial.

La mano de obra local necesita calificarse para las nuevas ocupaciones, indicó Abreu. Sindicatos, plantas procesadoras de azúcar y etanol y empresas agroindustriales se sumaron también para impulsar juntos el programa Renovación, destinado a capacitar 7.000 trabajadores cañeros en nuevas funciones, dentro o fuera del sector.

OPCION AL TRABAJO DOMESTICO
Las mujeres son la prioridad en los cursos organizados por la SERT, que capacitó 1.400 personas los últimos dos años. El objetivo es que las mujeres de Guariba no se vean forzadas a trabajar en el servicio doméstico en ciudades vecinas más ricas.

Ahora hay 620 registradas como empleadas domésticas y unas 500 trabajan en Ribeirão Preto, capital de esta región cañera con 85 municipios y 50 plantas de azúcar o de etanol. Allí ganan unos 500 dólares mensuales, derechos laborales y fines de semana libres, al contrario de lo que pasa en Guariba. La alcaldía, además, subsidia 40% del costo del pasaje de la línea de buses que une a las dos ciudades, distantes 64 kilómetros. Un beneficio que no disfruta Cilia María Silva, de 57 años, residente en la vecina Pradópolis, que
debe movilizarse una hora diaria para trabajar como doméstica en Ribeirão. Ella añora los cuatro años que trabajó en una central azucarera de su municipio, y solo se consuela con su cercana jubilación.

“Faltan industrias y fábricas para generar más empleos” en Pradópolis y Guariba, sentenció, para explicar a IPS que envidia a los 8.000 habitantes de la vecina localidad de Dumont, porque gozan de pleno empleo,
gracias a una fábrica procesadora de maní.

MUJERES CON EXPERIENCIA
“Lavar ropa de otros, jamás”, descartó rotunda Rita de Cassia Cardoso, una de las más jóvenes entre las 34 aspirantes a operadoras de cosechadora. Con apenas 21 años, ya condujo camiones, produjo artesanías y realizó variadas tareas agrícolas en su natal estado de Mato Grosso del Sur, en el centro-occidental del país. Llegó a Guariba con su marido, obrero en una central de la zona, y con el curso dijo que avanza hacia “mi sueño desde niña: ser camionera de una planta”. Pero asegura que no se quedará en eso, sino que estudiará agronomía, “para acompañar a la globalización”.

Su colega Rita das Neves, con 30 años y un hijo, ejemplifica el drama de los cortadores. Empezó a los 11 años, cuando “ni siquiera aguantaba el (obligatorio) protector del tobillo” por ser demasiado grande para ella.
Su marido se dañó la rodilla durante una cosecha y ahora cuida un bar familiar, mientras ella busca ascender dentro del sector. En cada grupo de 50 cortadores solo se admiten cuatro o seis mujeres, puso Neves como
ejemplo de la discriminación que soportan en el cañicultivo. Y eso que “yo cortaba más caña que ellos”, criticó.

Neves estudió contabilidad, pero no logró empleo en el área “por no tener apellido (ser pobre)”. También fue empleada doméstica, pero “preferí cortar caña”, hasta ahora que, embarazada de tres meses, aprende a manejar grandes máquinas agrícolas. “En esto está mi  futuro y el de mi familia, no tengo duda”, aseguró.
(IPS)




Contratapa. Mejor el sábado.

Lia Schenck

Yo me enamoré hace dos años de un hombre que no es muy romántico aunque al principio me parecía que sí. Todo este tiempo estuve tratando de hacerle recordar que nos conocimos un sábado y que desde entonces para mí los sábados son días mágicos y sagrados y me gustaría celebrarlos, no digo con champán pero sí con Terma que es lo que yo tomo porque no consumo nada de alcohol. El trabaja en un taxi y al principio los sábados pasaba por casa para darme un beso aunque fuera de madrugada y tuviera que dejar esperando a un pasajero en el asiento de atrás. Él es muy honesto y lo hacía cuando el viaje le quedaba de pasada, por supuesto que le descontaba las fichas al pasajero y cuando se bajaba no le aceptaba propina. A mí eso me conmovía y se lo agradecía mucho. Inclusive una noche que llovía mucho y que le dio lástima dejar a una señora esperando en el asiento de atrás, me pidió que bajara con un paraguas y los tres subimos a mi apartamento para hacer un brindis con Terma por nuestra felicidad. Pero eso fue al principio. Ahora para él los sábados son un día como cualquier otro y yo siento que la felicidad se me escapa como el agua entre los dedos. Una amiga mía dice que yo exagero y que las cosas están bien como están. Pero a veces creo que lo mejor sería dejarlo porque me siento muy decepcionada. No me imagino que sería de mí si lo hubiera conocido un lunes. El lunes es uno de esos días que ni siquiera un brindis con champán puede agregarle un poquito así de magia. Es cierto que la semana tiene que tener lunes y que hay grandes amores que se iniciaron un lunes pero eso no alcanza para predisponerme, al menos a mí, a celebrar un encuentro romántico ni para recordar un aniversario semanal de nada. Los lunes no tienen burbujas. Ya de por sí los sábados son días como para descorcharlos y celebrarlos aunque no pase nada especial. Hasta los romanos, que se pasaban de fiesta en fiesta, dedicaban ese día a Saturno y tomaban más vino y comían más uva que de costumbre. Tal vez mi amiga tenga razón y yo exagere un poco. Tengo que valorar el hecho de que él sea taxista y pueda pasar por mi casa aunque sea de pasada y con pasajero incluido. Si lo dejo no hay nada que garantice que no me vuelva a enamorar (por supuesto después de un período de duelo) y a lo mejor la suerte determina que trabaje como seguridad en algún edificio o en un estacionamiento y no pueda hacer abandono de su trabajo ni siquiera para llamarme por teléfono. O que trabaje en una de esas pizzerías que hacen la masa de ocho de la noche a las tres de la madrugada. O que no trabaje y esté deprimido todas las noches. O lo que es peor: que lo conozca un lunes. Todas esas posibilidades me van a complicar la existencia y no voy a tener nada que festejar. Pienso que lo mejor sería poder llegar con mi novio a ciertos acuerdos,por ejemplo sábado por medio brindar con Terma por nuestra felicidad, o brindar el último sábado de cada mes ... o por lo menos un sábado cada dos meses. Cualquier cosa antes que no tener con quien brindar.

Contratapa. Domingo 17 abril 2011

martes, 5 de abril de 2011

Edición 3 de abril 2011

MUJERERÍOS

Petisa

¿body o no body?

Edición del domingo 3 de abril de 2011.

LIA SCHENCK
Por más que haya seguido el consejo de una amiga y por más que me imagino que a mi marido le puede gustar, yo no me animoa usar body. En un cajón de la cómoda, bastante escondidos debajo de las toallas, tengo prácticamente una colección de todos colores, inclusive uno que me compré cuando fuimos a Gramado hace tres años y que por supuesto él no llegó a ver ni siquiera adentro de la bolsa que me hice preparar como para regalo. Por más que el regalo fuera para mí misma, le hice poner hasta una moña violeta de papel de seda, a ver si así me entusiasmaba y lo estrenaba esa misma noche. Pero fue un nuevo fracaso. Todo esto me llena de desaliento y tengo mucho miedo de que mi marido se aburra de verme siempre de la misma manera. Mi desazón llegó al límite cuando para mi cumpleaños me regaló un camisón de franela con festón en el canesú, casi idéntico a los que de chica le vi usar a mi abuela. Yo quisiera cambiar esa manera de ser tan tímida que tengo y lo he intentado, pero no lo consigo. De verdad quiero dejar de ser tímida pero no tengo ninguna estrategia, ningún método. Lamentablemente y al respecto, los manuales de autoayuda no pueden autoayudarme porque las personas tímidas no nos animamos ni siquiera a comprar un libro para vencer la timidez. A veces tampoco sé si eso de no querer usar body tiene que ver con mi timidez o si más bien responde a un gusto personal .Con el tema del body, las estadísticas son muy claras: el 50% de las mujeres los acepta encantadas y el otro 50% los rechaza y no les adjudica ningún protagonismo en relación al erotismo. A lo mejor yo relaciono el body con el erotismo o las insinuaciones amorosas y no es así. A lo mejor también le pasa a mujeres que para nada se definen como tímidas y al igual que yo serían incapaces de usarlos, precisamente porque piensan que el hecho de ser tan cara no está en relación directa a los placeres que pueda desencadenar una lencería de última generación. Eso por un lado. Por otro lado, lo que sí me preocupa es lo del camisón que me regaló mi marido. Pero me tranquilizo pensando que como los hombres generalmente no saben elegir apropiadamente los regalos, es probable que haya comprado lo primero que vio colgado en una percha. Conozco muchos casos de hombres increíblemente enamorados y seducidos que a su última conquista le regalaron pantuflas con corderito o agarraderas con un árbol de navidad. A veces pienso que a lo mejor no soy tan tímida como creo y cualquiera de estos días me animo a ponermecualquiera de los bodys que tengo escondidos en el cajón de la cómoda. Tal vez una buena idea sea no ponérmelo a la noche sino cuando me levanto. A lo mejor, andar todo el día con él haciendo inclusive las tareas más rutinarias, como por ejemplo poner el agua para el mate o hervir fideos, contribuye a exorcizar el miedo que me produce.

Danza vital de hijas del exilio

Edición del domingo 3 de abril de 2011.
 
Mediante un proceso creativo intenso y comprometido, Leticia Erhlich y Noemí Alem emprendieron el  camino de dirigir un espectáculo de danza contemporánea titulado “Las hijas de Ulises”, que habla de las vivencias cercanas de una generación que conoció el exilio a través de la elección de sus madres y padres.
Tras ser premiada por los Fondos de Danza  Contemporánea de la Intendencia de Montevideo, la obra se  presentará los días 6, 7 y 8 de mayo en la sala Zavala Muniz del Teatro Solís, en el marco de Montevideo Danza.
 
Isabel Pérez

La composición colectiva de “Las hijas de Ulises” estuvo a cargo de Manuela Castellano, Florencia de Freitas, Florencia Ferrer Esquivel, Leticia Erhlich y Mariana Porciúncula. Reúne en un intenso trabajo con el cuerpo los relatos realizados por hijos e hijas del exilio, que fueron convocados al comienzo del largo proceso de armado. Varias de las nombradas son, además, protagonistas de la historia que hoy representan.
 
En diálogo con La República de las Mujeres, Erhlich, directora general del espectáculo y parte del equipo que compuso einterpreta la obra, informó que al comienzo la ideaera hacer algo más “autobiográfico” que llevaría por nombre “La hija de Ulises”, en consonancia con el título del libro que su propia madre –Ana María Araújo- escribió: “Maldición de Ulises. Repercusiones psicológicas del exilio” y siguiendo un hilo conductor que atraviesa su propia historia de vida.

DE VIVENCIA INDIVIDUAL A DIMENSION COLECTIVA

Sin embargo, en el camino fueron surgiendo nuevas ideas, pues la experiencia de ser hijas del exilio era compartida por varias de las intérpretes y creadoras, a la vez que la dimensión colectiva del asunto comenzó a pautar y definir el propio proceso creativo. Así, decidieron convocar a otros hijos e hijas, para que compartieran sus recuerdos, sus vivencias.
 
Más allá de las trayectorias personales y familiares de vida, había cosas que se repetían en tanto actores directos. No se trataba en esta propuesta de interpretar lo que vivieron quienes eligieron el exilio, sino lo que les sucedió a aquellos “que no tuvieron opción, lo que no es ni bueno ni malo, pero es algo que te tocó”.

El inicio “fue increíble”, describe Leticia Erhlich, pues se trataba de gente que “ni conocíamos” y que “se abrieron, contaron sus historias”, a través de un trabajo muy intenso en talleres para los que se utilizó como metodología la Sociología clínica. A partir de allí comenzó el proceso creativo, que “fue muy difícil porque teníamos mucho material y mucha responsabilidad también, porque nos preguntábamos ¿qué vamos a hacer ahora?”.
 
La responsabilidad no era sólo con quienes habían participado, sino con todos los hijos e hijas del exilio, pues si bien “no deja de ser ficción -no es un documental, una investigación académica, aunque hay investigación en el proceso de creación- implica una entrega muy intensa como intérpretes”.

PERDIDAS Y ADQUISICIONES

A pesar de la intensidad que reviste el tema  y las vivencias en particular de las personas –en aquel entonces niños y niñas-, la idea era que la obra dejara “una energía de esperanza, positiva” pues en realidad “estamos todos orgullosos de la historia y convencidos de la riqueza que implica haber vivido en el exilio”.
 
A pesar de que se hable de la infancia y el retorno de personas que son hoy hombres y mujeres, “El femenino se mantuvo, porque las intérpretes somos mujeres”. En parte, siente la autora y lo expresa, es desde ese lugar que se realiza el trabajo, del de mujeres, y es por ello que el título hace referencia a ellas.
 
Todos además son hijos e hijas “que volvimos, que estamos acá (en Uruguay) hoy”, destaca Erhlich, no obstante que en la obra hay un pasaje dedicado a una hija que no volvió y da cuenta de una amistad que no pudo continuar; se titula “Yo tuve que volver y vos tuviste  que quedarte”.  
 
En los encuentros, y a pesar de las diferencias de cada historia, hubo recuerdos recurrentes, reiterados, que hablan de una vivencia colectiva: “Ese retorno para nosotras no es retorno, porque nacimos en otro lado”, entonces no es lo mismo que para quien llega de nuevo a un lugar que conoció.
 
Implicó “dejar nuestra ciudad natal, nuestra lengua materna”, y cuando nos encontramos descubrimos que había anécdotas comunes: “la frase típica era: decí algo en francés, decí algo en sueco”, cuenta Erhlich, agregando que hay cosas más cotidianas que se extrañan, como la comida, los olores, las calles que recorríamos. Un tironeo que de algún modo construyó sus identidades.
 
TRAYECTORIAS DE VIDA

El trayecto de la obra marca un vaivén que refleja el de las experiencias vividas por esas hijas y se traduce en
los propios títulos: “Retorno”, “Paraíso perdido”, “Lobo estás”, “Aeropuerto”, “Nunca más volví…siempre
supe que iba a volver”, “Yo tuve que volver y vos tuviste que quedarte”, “Fragmentación”, “Línea de vida”,
“Flor en el camino”, “Liberté”. Parte de las letras de la música original de este espectáculo, compuesta por Ernesto Naishtat, Eduardo García, Facundo Fernández Luna y Gustavo Castellano, expresan y reúnen las vivencias de niños y niñas en un retorno a un lugar del que no habían sido: “Nací sin saber, sin querer volver (…) tan cerca de mí esta separación (…) soy de la ciudad de los sin ciudad”, por ejemplo.

La obra “hace referencia a la Odisea, hace referencia a Ulises, al retorno de Ulises, al exilio de Ulises… pero también yo hago alusión al título de la obra de mi madre: ´La maldición de Ulises´, porque yo soy hija de ese Ulises. Y además mi madre cuando lo escribe en Francia me lo dedica”, remata Leticia Erhlich.
 

Exámenes de virginidad, arma del ejército egipcio

Edición del domingo 3 de abril de 2011.
Mujeres egipcias que fueron detenidas el pasado 9 de marzo,cuando soldados intentaban desalojar a manifestantes acampados en la plaza Tahrir de El Cairo, denunciaron que en una prisión militar fueron humilladas sexualmente. A las que no estaban casadas, un hombre que se decía médico les practicó “exámenes de virginidad”, mientras militares observaban y las filmaban.


Cam Mcgrath

Salwa El-Hosseiny se había unido a los manifestantes en la Plaza Tahrir de la capital de Egipto, cuando un oficial de seguridad vestido de civil la tomó por la fuerza y la entregó a miembros del ejército que se encontraban frente a un museo cercano.
Esta joven de 20 años fue golpeada, torturada con choques eléctricos y acosada verbalmente. Luego fue enviada con otras 20 mujeres detenidas a una prisión militar en las afueras de El Cairo.

Fue allí que el ejército, que gobierna Egipto desde la renuncia del presidente Hosni Mubarak el 11 de febrero, develó su última arma para reprimir el disenso: la humillación sexual. “Fui llevada a una prisión militar junto a otras jóvenes, y se nos ubicó en una habitación con dos puertas y una ventana”, contó El-Hosseiny durante una conferencia de prensa a mediados de marzo pasado. “Le rogamos a la guardia mujer que cerrara las puertas (para no ser vistas), pero se negó. Se nos ordenó sacarnos toda la ropa y nos inspeccionaron mientras nos filmaban con cámaras para fabricar evidencia con el fin de acusarnos de prostitución”, dijo. El-Hosseiny y otras mujeres detenidas en la misma prisión testificaron que un hombre que decía ser médico les realizó “exámenes de virginidad” a las que no estaban casadas, amenazando con acusarlas de prostitución si se resistían. “La guardia de la prisión nos desnudó y nos golpeaba con mangueras”, dijo una de las detenidas, trabajadora social de 29 años, soltera. “Fui examinada por un hombre que usaba una túnica blanca y por una guardia mujer de la prisión”, contó.
FLAGRANTE VIoLACION DE DERECHOS HUMANOS

Grupos de derechos humanos exigieron una investigación de los abusos, que habrían ocurrido el 9 de marzo, cuando soldados intentaban desalojar a los manifestantes que acampaban en la Plaza Tahrir. Más de 170 manifestantes, incluyendo 18 mujeres, fueron arrestados en una violenta represión y llevados a un anexo del Museo Egipcio. Los manifestantes afirman haber sido golpeados y torturados por oficiales del ejército en el museo antes de ser liberados o transferidos a una prisión militar, donde fueron víctimas de más torturas y humillaciones.
Una declaración conjunta de 17 organizaciones egipcias de derechos humanos condenó el abuso físico y  psicológico perpetrado contra los detenidos. Los grupos también señalaron que la participación de médicos en esos actos suponía una flagrante violación al juramento hipocrático.
 “La tortura en sí ya es una de las peores violaciones a los derechos humanos y a la santidad del cuerpo humano, pero los incidentes reportados son además una clara violación de las convenciones nacionales e internacionales que regulan la profesión médica, así como un rompimiento de la ética médica”, señala la declaración.
Amal Abdel Hadi, jefa de la Nueva Fundación de Mujeres, dijo que la policía y las fuerzas de seguridad egipcias tenían una larga historia de maltrato físico e intimidación a detenidos.
VIOLENTAR CUERPOS DE MUJERES, UNA VIEJA PRACTICA

“Es la primera vez que oímos de exámenes forzados de virginidad, pero humillar a las mujeres violentando su cuerpo es una vieja práctica”, aseguró a IPS. “No es inusual que la policía o los oficiales de seguridad detengan a una mujer y la obliguen a desnudarse porque su esposo ha sido atrapado robando o es sospechoso de terrorismo”, añadió. Explicó que la humillación sexual era una forma perturbadora y efectiva de tortura psicológica. Fue empleada por el personal de la infame prisión militar estadounidense en Abu Ghraib, Irak, dejando profundas huellas en las víctimas y en la opinión pública mundial.
Las manifestantes mujeres detenidas el 9 de marzo dijeron que los soldados les ataron las manos y les  vendaron los ojos para golpearlas y herirlas con choques eléctricos. Al menos seis fueron obligadas a someterse al examen, en el que un médico del ejército les inspeccionaba la vagina para constatar que estuviera intacto su himen. “Obligar a las mujeres a desnudarse y someterlas a exámenes de virginidad es muy insultante, y el impacto de esta acción puede ser profundo”, señaló la psicóloga Mona Hamed, del Centro El-Nadim para la Rehabilitación de Víctimas de la Violencia. En la conservadora sociedad egipcia, se espera que las jóvenes mantengan su virginidad hasta el matrimonio.
El estigma social que sufren aquellas que se desnudan en público o tienen sexo prematrimonial muchas veces las lleva al suicidio, o es motivo suficiente para ser víctimas de un “asesinato de honor” por parte de su propia familia.
Hamed, quien entrevistó a varios manifestantes detenidos, dijo que las mujeres con las que habló le contaron que los médicos del ejército permitieron que soldados las observaran y les sacaran fotografías mientras eran examinadas. Temen que su reputación sea destruida si las fotos son difundidas.
MENSAJE DE NO TOLERANCIA DEL DISENSO

La mayoría de las mujeres detenidas fueron juzgadas en un tribunal militar el 11 de marzo y liberadas dos días después. Algunas recibieron sentencias de un  año de prisión por mala conducta, destrucción de propiedad pública, obstrucción del tráfico y porte de armas.
La tortura y la humillación que sufrieron estas mujeres fueron un “fuerte mensaje” a la comunidad de que el disenso no sería tolerado, concluyó Hamed.
“Un padre puede aceptar que su hija asista a una protesta, incluso bajo riesgo de resultar herida, pero nunca aceptaría que fuera si hay riesgo de que sea acosada sexualmente, violada o humillada”, explicó. (IPS)

¿Tus derechos son hechos?

 Edición del domingo 3 de abril de 2011

ELENA CLAVELL (*)

Para que los derechos en salud sean una realidad hay que conocerlos. La cartilla de derechos y deberes de los pacientes y usuarios de los servicios de salud, es una de las herramientas para lograr una efectiva difusión de los mismos. La aprobó el 21 de diciembre del 2010 el ministro de Salud Pública, Daniel Olesker, y durante este año las instituciones prestadoras de servicios deberán entregarla a todos sus usuarios y usuarias.


Qué es la cartilla

Es una recopilación sintética de leyes, decretos, ordenanzas y otras normativas sobre derechos y beneficios que tienen los usuarios en materia de salud. En estos últimos años el Ministerio de Salud Pública (MSP) ha trabajado intensamente en nuevas regulaciones sobre derechos y beneficios del Sistema Nacional Integrado de Salud, inspirándose en uno de los principios fundamentales de la reforma de la salud: el empoderamiento de la persona usuaria. Si bien existía una cartilla aprobada en el año 2002, se avanzó mucho en materia de derechos y esto amerita una nueva, que recoja los avances de forma clara y precisa. Se trata de un instrumento para que usuarios y usuarias conozcan sus derechos en materia de salud y también losmecanismos por los cuales reclamarlos y/o defenderlos en caso de que sean vulnerados. De esta forma, el 
MSP hace un aporte más a la promoción del usuario como sujeto de derechos, es decir en un rol activo. Preguntas con respuestas La cartilla está estructurada en ocho capítulos, denominados “Afiliación”, Beneficiarios del Seguro Nacional de Salud”, “Cobertura”, “Acceso a los servicios”, “Participación e información”, “Historia clínica”, “Consentimiento informado” y “Deberes de pacientes y usuarios”. 
Algunos de los derechos detallados en la cartilla son para todos los usuarios, mientras que otros son derechos o beneficios específicos para usuarios amparados por el Seguro Nacional de Salud. Preguntas como ¿puedo cambiar de una institución a otra en cualquier momento?, ¿qué beneficios tengo al ser jubilado Fonasa?, ¿tengo derecho a obtener una copia de mi historia clínica?, ¿tengo derecho a estar acompañada en el parto?, son contestadas en los distintos capítulos de esta cartilla. 

¿Dónde se obtiene?

Se obtiene en el prestador del Sistema Nacional Integrado de Salud donde la persona usuaria está registrada. Estas instituciones, que deben entregar la cartilla a todos sus usuarios en un plazo máximo de un año, según lo determinó el Ministerio de Salud Pública, podrán elegir el formato de la misma (en papel o por vía electrónica) pero teniendo en cuenta factores como la edad y el acceso a medios electrónicos por parte de la población que atienden. Los usuarios podrán exigir a su prestador que se le entregue la cartilla y reclamar en caso de que alguno de sus derechos no se respeten. 
Para estos casos, el MSP dispone del call center 0800 44 44 y de un correoelectrónico: infoderechos@msp.gub.uy.

(*) Directora General del Sistema Nacional Integrado de Salud, representante del Ministerio de Salud Pública en la Junta Nacional de Salud.